Extraños asesinatos
La sala de espera del médico estaba como siempre a tope. La cola era interminable, las conversaciones siempre eran las mismas.
–No se puede uno ni poner enfermo, menudas colas.
Todos estaban esperando lo mismo, que un especialista les visitase para poder cobrar definitivamente algún tipo de ayuda.
Tres años antes.
Unos vecinos del pueblo llamaron a la policía. Un fuerte grito en la tarde noche les asustó. La policía se personó rápidamente en el lugar y lo que encontraron fue para revolver el estómago de cualquiera: Juan, un vecino, estaba muerto por dos cortes en el cuello. Nada hacía suponer quién fue el asesino, solo encontraron una tarjeta de visita de una empresa dedicada a la venta de vinos y licores. La empresa era San Mateo S.L. y en ella estaba escrito con rotulador: “9 – 12”. ¿Qué significaban esos números? Después de investigar varios meses se dejó el caso archivado sin culpable. Seis meses después, junto al río, encontraron el cadáver de otro vecino. Andrés, un enamorado de la pesca. Su muerte fue provocada por asfixia, alguien le apretó el cuello hasta la muerte. La inspección del sitio no daba ningún tipo de pistas sobre el asesino. En la cesta de pesca apareció otra vez una tarjeta de visita de la misma empresa y con los mismos números: “9 – 12”.
Todo hacía suponer que el asesino fue la misma persona, la pregunta era: ¿por qué? Las investigaciones seguían su curso.
¿Tenía algo que ver la empresa San Mateo S.L. con los asesinatos? Los policías estuvieron varias veces en la empresa, desde el gerente al último de los empleados, pero nadie sabía nada, nadie sospechaba de nadie.
¿Por qué aparecía siempre la tarjeta de la empresa, con los mismos números junto a los fallecidos?
Pasado un tiempo, solo los encargados de los casos seguían pensando.
Hace año y medio, otro triste suceso acaeció en la localidad. Una vecina de nombre Teresa se lanzó al vacío desde el terrado de su bloque de pisos, una altura de seis plantas. Como consecuencia, su fallecimiento fue instantáneo.
El juez ordenó el levantamiento del cadáver, no sin antes certificar que no fue voluntario lo sucedido: junto a la difunta, la dichosa tarjeta de visita con los mismos números: “9 – 12”.
Los investigadores lo tenían claro, estaban ante un asesino en serie, pero… ¿cuál era el móvil? ¿Qué significaban esos números siempre con la tarjeta de la misma empresa?
Las investigaciones no cesaron, siempre intentando descifrar el significado de los números y por qué. Normalmente, el asesino en serie no tiene una lógica, solo la tiene él en su mente, el rompecabezas había que descifrarlo.
Después del asesinato de Teresa, tres personas más fueron asesinadas, todas aparecieron con la misma tarjeta de visita y los mismos números: “9 – 12”.
A la ciudad llegó el nuevo inspector al que le encargaron la investigación y después de seis meses ya tenía una pista y querían asegurarse de lo que hacían antes de dar el último paso y detener al asesino de la zona.
Hoy es el día D para detener al sospechoso, por eso entran en la sala de espera del médico y, después de observar a todos los presentes, se acercan a Anselmo y lo detienen.
La sala de visitas quedó en un profundo silencio, todos muy sorprendidos de la detención.
–¿Por qué me detienen? –preguntó una vez en comisaria.
–Es sospechoso del asesinato de como mínimo seis personas.
–¿Qué hacías en la consulta médica?
–Esperaba mi turno para ser atendido.
–Te estamos siguiendo desde hace un tiempo, cada día vas a la consulta, pero no tienes hora de visita.
–Para pasar el tiempo, no tengo trabajo y de esa manera se me pasa el tiempo volando.
–Confiesa, tú mataste a esas personas, solo nos falta saber por qué –acusación directa del policía.
–No se nada –gritó el acusado, visiblemente nervioso. Después de más de tres horas de interrogatorio acabó confesando.
–Si, yo los maté, porque gracias a ellos mucha gente que lo necesita no puede cobrar una pensión de invalidez.
–¿De dónde sacó las tarjetas de visita de la empresa San Mateo S.L.?
–En una feria de licores que visité cogí un montón de ellas con la idea puesta en lo que acabaría haciendo con los tramposos que estafan a la sociedad.
–¿Y los números 9 – 12 qué significado tenían?
–Ya lo saben ustedes, por eso vinieron a detenerme.
–Si, efectivamente, después de mucho estudiar el caso llegué a la conclusión final y lo acerté –contestó el investigador jefe.
Una vez finalizada la declaración en presencia de los correspondientes abogados, el nuevo comisario abandonaba el lugar acompañado de su ayudante.
–Jefe, ¿me puede explicar como llego a esa conclusión?
–Elemental querido amigo. Las tarjetas todas eran de la empresa San Mateo, verdad?
–Si, efectivamente, ¿eso que tiene que ver?
–Soy un lector de la Biblia y me sumergí en la Biblia según San Mateo, el resto es fácil.
–Jefe, sigo sin entenderlo.
–Si lees la biblia según San Mateo, en el capítulo 9 versículo 12 dice: “No son los sanos los que necesitan médico, sino los enfermos”. Después de analizar esa frase supe que el asesino solo mataba a personas que cometían fraude para cobrar pensiones.
Todos los asesinados cobraban su pensión fraudulentamente y él solo quería vengarse acabando con ellos.